Varios países europeos, entre ellos Dinamarca, Noruega, Italia e Islandia, suspendieron este jueves la vacunación contra el covid-19 con el fármaco de AstraZeneca después de que unos informes señalaran “casos graves” de formación de coágulos de sangre en personas a las que se les había administrado esa vacuna.
La semana pasada, Austria dejó de usar un lote de vacunas de esta misma farmacéutica mientras se está investigando una muerte por trastornos de coagulación y una enfermedad por embolia pulmonar. Una decisión similar fue tomada por Estonia, Letonia, Lituania y Luxemburgo.