El club catalán cree que hay que analizar a profundidad las razones del rechazo generalizado al proyecto, y no tomar ninguna “acción precipitada” ni debatir el asunto “bajo criterios de presión e intimidación injustificados”.
El F.C. Barcelona ha decidido continuar como miembro fundador de la recién creada Superliga europea, en medio de la negativa reacción pública que ha suscitado. Renunciar “hubiera sido un error histórico”, aseguró el equipo este jueves en un comunicado de prensa.
El club catalán defiende la iniciativa argumentando la necesidad de emprender reformas que garanticen la “sostenibilidad financiera y la viabilidad del mundo del fútbol”. La Superliga busca “mejorar la calidad y el atractivo del espectáculo” ofrecido a sus aficionados, al mismo tiempo que promueve “nuevas fórmulas de solidaridad con toda la familia del mundo del fútbol”, resalta el documento.
Finalmente, el Barcelona considera que hay que analizar a profundidad y con serenidad las razones del rechazo generalizado al proyecto deportivo, y no tomar ninguna “acción precipitada” ni debatir el asunto “bajo criterios de presión e intimidación injustificados”. Enfatiza además que, si así se requiere, hay que reformular y reconsiderar la propuesta inicial para “solucionar todas aquellas cuestiones, siempre en beneficio del interés general” del balompié.
“El F.C. Barcelona actuará en todo momento con criterios de prudencia y pide la máxima comprensión, respeto y hasta paciencia a la masa social del F.C. Barcelona y a toda la opinión pública”, concluye el club.
Estas declaraciones se producen el mismo día que el presidente de la entidad deportiva, Joan Laporta, rompió el silencio sobre la situación, al señalar que la Superliga “es una necesidad” y recalcar que “ha habido presiones a algunos clubes, pero la propuesta sigue existiendo”. Laporta continúa creyendo en la posibilidad de alcanzar un acuerdo, aunque precisó que se requieren “más recursos para que esto sea un gran espectáculo”.