Unas 14 toneladas de moluscos se adhirieron al equipamiento acuático, provocando que este comenzara a hundirse.
Un inesperado incremento de la población de ostras en el campo de regatas Sea Forest Waterway en la Bahía de Tokio, donde tendrán lugar las competiciones de remo y canotaje de los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, complicó la preparación del evento deportivo a pocos días de su comienzo, informan medios locales.
El problema fue advertido luego de que los organizadores observaran que los elementos flotadores colocados en el agua para contener el movimiento de las olas habían comenzado a hundirse.
Una inspección reveló que una gran cantidad de ostras del tipo ‘magaki’ —consideradas como un manjar en el país insular en la época invernal— adheridos a los flotadores.
Como consecuencia, el equipamiento afectado, distribuido a lo largo de más de 5,4 kilómetros frente a la línea costera, debió ser limpiado por equipos de buzos o incluso remolcado a tierra para su restauración.
Estas tareas a gran escala requirieron de numerosas horas de trabajo y ocasionaron costos adicionales por aproximadamente 1,28 millones de dólares.
En total, los organizadores retiraron 14 toneladas de estos valiosos moluscos, aunque no pudieron aprovecharlos para la comida.
“No hemos considerado consumirlos. Eso hubiera acarreado chequeos de seguridad”, comentó uno de los empleados a cargo del mantenimiento del Sea Forest Waterway.
Los Juegos Olímpicos de Tokio, que debían llevarse a cabo en 2020 pero fueron pospuestos debido a la pandemia, tendrán lugar del 23 de julio al 8 de agosto.
