Con estas palabras se refirió a un artículo sobre Tim Walz, candidato demócrata a la vicepresidencia, quien reiteró en un reciente debate que el “discurso del odio” no está protegido por la Primera Enmienda de la Constitución estadounidense.
Con estas palabras se refirió a un artículo sobre Tim Walz, candidato demócrata a la vicepresidencia, quien reiteró en un reciente debate que el “discurso del odio” no está protegido por la Primera Enmienda de la Constitución estadounidense.